Con relación al hecho, Vicente Parra, docente-investigador de manejo y conservación de suelos de la Facultad de Recursos Naturales de la Escuela Politécnica del Chimborazo (Espoch), manifestó que factores geológicos, socio-económicos, ecológicos y manejo de los recursos naturales fueron los principales detonantes para que se produzca el deslizamiento de masas en el cantón Alausí.
Con relación al geológico manifestó que hay estudios en los que se concluyen que el subsuelo del cerro Casual, en donde se registró el deslizamiento, estaba sobre material no consolidado, que quiere decir que el suelo del lugar que se movió es producto del material acumulado de varios siglos.
En lo ecológico dijo que incide el cambio climático que se refleja con el incremento de la frecuencia y variabilidad de lluvias, que, según datos de la estación meteorológica de la Espoch, en Riobamba las lluvias son de 600 milímetros distribuidos en seis u ocho meses al año, pero que ahora esa misma cantidad se evidencia en dos o tres meses, algo que también se refleja en Alausí.
Asimismo, comentó que el factor humano es detonante para que se registren estos fenómenos naturales por la forma en cómo se maneja el suelo, el agua, cunetas, canales de riego, porque todo genera una presión sobre el material no consolidado y se registra el movimiento de masas, que además hay deforestación y no se aplica el plan de ordenamiento territorial (PDOT) en base a las aptitudes del suelo.
Aseguró que el PDOT no se aplica por el tema socio económico, porque por este factor no hay alternativas para la construcción de sus casas, que se ejecutan incluso en zonas de riesgo.
Desplazarse
Indicó que se deben generar opciones productivas económicas o entrega de créditos para poder brindar alternativas a las familias con el fin de que se desplacen a otros sitios, porque el tema no es solo que se muevan, sino qué van a hacer en los nuevos asentamientos en donde van a vivir, porque al ser gente bastante vulnerable a veces no se movilizan por el miedo a perder su tierra que es lo único que dispone.
Señaló que también es importante la aplicación de políticas públicas sobre la gestión de riesgo porque la información y los estudios están, pero lamentablemente a veces no se aplican por ser un tema bastante complejo.
Asimismo, otra posible solución inmediata para minimizar el impacto que genera el movimiento de masas a futuro, es la realización de estudios de contingencia a detalle, más amplios en las zonas cercanas al lugar de riesgo, porque no se tiene que olvidar que todo el material desplazado queda bastante sensible que podría seguir ocasionando más sucesos similares.
Entre las medidas preventivas considera importante la evacuación que se hace en zonas aledañas al deslizamiento del domingo, al reiterar que son fenómenos naturales que no se pueden predecir con exactitud, ni tampoco evitar, más aún cuando por las acciones antrópicas de los seres humanos se aceleran los procesos de detonación.
El docente-investigador de la Espoch arguyó que todos los fenómenos naturales que pasan son indicadores que se está frente a una crisis climática, ambiental, por el mal manejo de los recursos naturales, la contaminación, la deforestación y otros factores que alteran los ciclos hidrológicos y de la naturaleza, ante lo cual hace el llamado para ser más conscientes con el cuidado de la calidad y cantidad de los recursos naturales que hay en el Ecuador.
Cifras
El número de fallecidos y por consiguiente de desaparecidos varían con el pasar de los días, en el transcurso de la semana se dieron cifras de que el número de muertos sumaban diecisiete, además de 37 heridos y 72 desaparecidos.
Además, se registran 32 personas rescatadas, 1 unidad educativa afectada, dos bienes públicos (estadio y coliseo) destruidos, 2.32 kilómetros de vías afectadas, 163 viviendas afectadas, 57 viviendas destruidas en la zona cero, 25% del alumbrado público afectado, 60% del servicio de agua potable afectado, 20% del servicio de alcantarillado afectado y dos bienes privados destruidos.